La política en la Ciénega
Lo señalamos la semana pasada, el todavía diputado federal Ricardo
Sánchez Gálvez recibió ya la invitación para integrarse al equipo de trabajo de
la próxima administración federal, aunque, dijo, aceptará sólo si en su nuevo
encargo se pueden generar beneficios para la entidad y la región.
Pero el tema en Michoacán son las demandas para que Víctor Báez Ceja y
Carlos Torres Piña, presidente y secretario general del Comité Estatal
perredista, respectivamente, abandonen el cargo y se lleve a cabo una consulta a
la militancia para nombrar nuevas dirigencias; en palabras de Enrique Bautista,
ex legislador local y líder de opinión al interior del partido, esta renovación
se hace necesaria ante el desgaste de la actual dirigencia en virtud de los
resultados obtenidos en los últimos dos procesos electorales que, dicho sea de
paso, se perdieron.
Lo anterior ha generado que aún sin darse a conocer las bases para el
proceso de renovación, tanto en la cúpula estatal como en los comités
municipales comience ya el movimiento de piezas en busca de reacomodo, y uno de
ellos fue el mismo Torres Piña, que el viernes pasado se reunió con líderes de
izquierda del municipio de Sahuayo, en cuya reunión se realizó una defensa
sistemática de la postura de la actual dirigencia, pero sin descartar su
aspiración a dirigir de manera formal el destino del partido que a partir del
proceso estatal del 2011 cayó a la tercera posición en la medición de fuerzas
políticas en Michoacán.
De manera local el proceso de renovación se busca, aunque por diferentes
motivos: establecido está que la demanda de renovación de la dirigencia estatal
obedece al menos en el plano visible a los malos resultados obtenidos en los
últimos procesos electorales; sin embargo en el municipio de Jiquilpan se busca
el proceso de renovación más en el afán de erradicar grupos de opinión y
liderazgos que como un mero castigo a una dirigencia disfuncional, ya que los
números obtenidos al menos en el proceso municipal del 2011 en que se revalidó
la permanencia del PRD como primera fuerza política serían un argumento sólido
para quedarse.
En ese tenor, la Alianza por la Unidad Democrática (AUD) ha destapado ya
a su ex coordinador municipal Nicolás Vargas Miranda para contender por la
dirigencia local; por otro lado, aunque no de manera oficial, se ha señalado
que podría ser el todavía secretario del Consejo Político Municipal y director
de Desarrollo Social de este municipio, Luis Bautista, la carta fuerte del
grupo del ex alcalde Francisco Mora, quien fiel a su estilo se hace presente en
todo evento en el que exista la posibilidad de exposición mediática.
Y es que en fechas recientes el ex edil encabezó a un grupo de colonos
del predio Palos Altos para reclamar supuestas provocaciones de otro grupo
encabezado por Javier Camacho, y señalar la falta de intervención de las
autoridades municipales para frenar la creciente violencia en ese lugar;
también se hizo presente en la presentación del último informe de actividades
de Luis Cárdenas como presidente del Módulo de Riego La Palma de la Ciénega, en
compañía de distinguidos perredistas.
Por cierto, en el tema del módulo parece ser que la elección del nuevo
presidente de este órgano concesionario de la infraestructura de riego de esta
región no será todo lo tranquila que se pudiera esperar, y es que, pese a los
llamados a no hacerlo, los ediles de esta región comenzaron a meter las manos
en este proceso.
De manera concreta, es notorio el apoyo de Froylán Zambrano, edil de
Villamar para con Francisco Tejeda, comisariado ejidal en Sahuayo, quien aspira
al cargo y hay quien asegura que este apoyo se deriva de los reclamos del
actual presidente Luis Cárdenas para que este municipio realice las
aportaciones convenidas por el uso de la infraestructura para el desalojo de
aguas pluviales y residuales.
José Luis Ceja Guerra/ Ciénega
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